El Salvador y Paraguay fortalecen la regulación de criptomonedas

El 10 de marzo de 2025, El Salvador y Paraguay firmaron un acuerdo regulatorio para mejorar el control y supervisión de las criptomonedas. Este Memorándum de Entendimiento (MOU) busca facilitar el intercambio de experiencias y conocimientos, incluyendo la trazabilidad de activos digitales. El acuerdo fue sellado entre la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad) de Paraguay, liderada por Liliana Elizabeth Alcaraz Recalde, y la Comisión Nacional de Activos Digitales (CNAD) de El Salvador, presidida por Juan Carlos Reyes García.
Fortalecimiento de la Regulación de Criptomonedas
Entre los puntos clave del acuerdo se destaca la detección de entidades operando sin licencia y el desarrollo de políticas conjuntas para prever el lavado de dinero. Paraguay intenta aprender de la experiencia de El Salvador en regulación de Bitcoin, mientras que este último ha implementado cambios claves en la ley para supervisar compañías relacionadas con criptomonedas. Estas acciones son esenciales para establecer un marco regulatorio sólido, amigo, que brinde confianza tanto a las instituciones financieras como a los inversores.
Aplicación de Normativas Internacionales
Un aspecto importante de este acuerdo es la aplicación de políticas recomendadas por el Grupo Internacional de Acción Financiera (GAFI), como la “Regla de Viaje”. Esta norma exige que la información personal y transaccional viaje con las transferencias de criptomonedas, bro, lo que adiciona un nivel de seguridad y transparencia, crucial en el ambiente digital. Esta medida no solo protege a los usuarios, sino que también refuerza la confianza en las criptomonedas como medio de intercambio.
Innovación Financiera y Atracción de Negocios
Este acuerdo, además de centrarse en la regulación de criptomonedas, ocurre en un momento en que Paraguay busca mejorar su regulación y explorar la creación de una moneda digital de banco central. Este movimiento es parte de un esfuerzo más amplio para fomentar un entorno financiero seguro que promueva la innovación en ambos países. Así, El Salvador y Paraguay no solo estarían regularizando mejor sus activos digitales, sino también atrayendo a más mineros y empresas del sector.