La Ciudad Fantasma de Turquía: Kayaköy, Deshabitada por Casi 100 Años
Kayaköy, en la provincia de Muğla, suroeste de Turquía, es una ciudad fantasma deshabitada desde hace casi un siglo. Es fascinante pensar cómo una ciudad activa se ha transformado en un testimonio silencioso de un pasado turbulento. Originalmente conocida como Levissi, esta ciudad albergaba unos 10,000 cristianos ortodoxos griegos hasta la década de 1920. La expulsión masiva fue el resultado del intercambio forzoso de población entre Turquía y Grecia tras la guerra greco-turca de 1922.
Ciudad Fantasma: Reflejo de un Pasado Difícil
Los residentes griegos fueron obligados a abandonar la ciudad, y los musulmanes que fueron traídos para reemplazarlos no se asentaron de manera permanente, dejando Kayaköy en ruinas. Las razones del abandono incluyen la tristeza palpable por la partida forzosa de los habitantes originales y desastres naturales como terremotos y tormentas, que han contribuido a su deterioro.
Las Familias que Permanecieron
Entre las pocas personas que decidieron quedarse en esta ciudad desolada, destaca la familia de Aysun Ekiz. Esta familia ha aprovechado la afluencia de turistas, dirigiendo ahora un restaurante para aquellos curiosos que desean explorar la historia de Kayaköy. Las casas de esta ciudad, muchas de ellas pintadas de azul para ahuyentar escorpiones, carecían de saneamiento adecuado y dependían de cisternas para almacenar agua.
Explorando la Iglesia Principal y la Antigua Escuela
Entre los edificios notables que quedan, la iglesia principal y la antigua escuela ofrecen una visión de cómo era la vida antes del abandono. Aunque la mayoría de los edificios están en ruinas, estos puntos destacan y atraen a los visitantes que desean absorber la historia y la arquitectura de la época.
Ciudad Fantasma: Un Atractivo Turístico Actual
Hoy en día, Kayaköy ha capturado la imaginación de muchos como una ciudad congelada en el tiempo. Los visitantes pueden pagar una entrada de tres euros para explorar las calles empedradas y las casas abandonadas. Es una oportunidad para reflexionar sobre el difícil pasado greco-turco y apreciar la belleza de una ciudad que alguna vez estuvo llena de vida.
Kayaköy, con su historia y belleza inmutable, se ha convertido en un lugar de peregrinación para aquellos interesados en el pasado y las enseñanzas que ofrece. ¡No hay límites para la fascinación que puede provocar una ciudad fantasma!