Justicia de EE. UU. acusa a hackers chinos de espionaje

El Departamento de Justicia de EE. UU. ha presentado una acusación monumental contra 12 hackers chinos, vinculados al gobierno de China, por actividades de espionaje y violaciones de ciberseguridad. Según el anuncio realizado el 5 de marzo de 2025, estos hackers, incluidos los destacados Yin Kecheng y Zhou Shuai del grupo APT27, también conocido como Silk Typhoon, han estado operando durante aproximadamente 10 años, atacando a más de 100 organizaciones estadounidenses. Entre las entidades afectadas se encuentran destacados sectores como el Departamento del Tesoro, empresas de tecnología, tanques de pensamiento, bufetes legales, y más.

Acusaciones contra los hackers chinos

Durante la última década, estos hackers chinos han implementado sofisticadas estrategias de infiltración. Utilizando técnicas como la explotación de fallas en software empresarial muy conocido, incluidos Microsoft Exchange, Palo Alto Networks, Citrix NetScaler e Ivanti Pulse Connect, lograron comprometer la seguridad de varias organizaciones. Se destaca que estos ciberataques tuvieron como objetivo suprimir la libertad de expresión y las libertades religiosas, afectando no solo a entidades gubernamentales, sino también a sistemas de salud y universidades.

Impacto en las organizaciones estadounidenses

Amigo, el daño provocado por las acciones de este grupo tiene una magnitud considerable. Más de 100 organizaciones estadounidenses sufrieron daños o estuvieron en riesgo debido a estas intrusiones. Además del Departamento del Tesoro, sectores tecnológicos y contratistas de defensa también estuvieron en la mira de estos hackers. Incluso, el FBI ha tenido que confiscar servidores privados virtuales que fueron utilizados para estas actividades ilícitas.

Conexiones oscuras con el Ministerio de Seguridad del Estado de China

Se ha identificado una conexión directa de estos hackers con el Ministerio de Seguridad del Estado de China (MSS), lo cual ha generado reacciones en la comunidad internacional. La campaña de hackeo respaldada por el contratista I-Soon del gobierno chino, que se ejecutó desde 2016 hasta 2023, no solo fue lucrativa sino también profundamente dañina para las organizaciones víctimas. Se estima que esta campaña generó “decenas de millones de dólares”.

Acciones legales y recompensas

Hermano, en respuesta a estas amenazas, el gobierno de EE. UU. ha intensificado sus esfuerzos legales y estratégicos, incluyendo la confiscación de servidores vinculados a estas actividades. Además, se ha ofrecido una recompensa de hasta $10 millones por información que conduzca a la captura de los implicados, con $2 millones adicionales específicamente para detener a Yin y Zhou.

La gravedad de los actos cometidos por los hackers chinos y su impacto en la ciberseguridad global continúa siendo un tema candente que requiere la atención y acción coordinada de la comunidad internacional.